Cómo desinfectar frutas y verduras al llegar a casa
¡Desinfectar frutas y verduras nunca fue tan fácil!
Actualmente, las hortalizas y frutas que consumimos suelen atravesar una amplia cadena de intermediarios desde su origen hasta su llegada al punto final de venta. A lo largo de este camino, se incrementa considerablemente la posibilidad de que los alimentos entren en contacto con algún patógeno que pueda comprometer nuestra salud. Además, el flujo constante de público al que están expuestos en supermercados y establecimientos de venta, acentúa la probabilidad de que los productos se vean afectados por bacterias perjudiciales que pueda afectar a su seguridad alimentaria.
En épocas de afloración de enfermedades virales o en situaciones de riesgo específico, se vuelve imprescindible establecer pautas para desinfectar frutas y verduras al llegar a casa. Esta rutina de limpieza y desinfección puede atribuirse también a otras compras, como alimentos envasados o productos empaquetados. No te preocupes si hasta el momento no habías puesto en práctica ningún proceso de desinfección a tu vuelta del supermercado, es mucho más sencillo de lo que puedas imaginar.
Para desinfectar frutas y verduras únicamente necesitarás bicarbonato de sodio y ácido cítrico, ¡nuestros dos productos estrella! Gracias a sus propiedades limpiadoras y desinfectantes, se convierten en la mejor ayuda para poner a punto tus hortalizas y frutas antes de guardarlas, cocinarlas o consumirlas. Además, tanto el Bicarbonato de Sodio como Ácido Cítrico Nortembio poseen Certificación Ecológica, permaneciendo libres de elementos alérgenos y constituyendo la solución más saludable para el mantenimiento del hogar y el cuidado de la familia.
Desde Nortembio, queremos facilitarte un par de útiles rutinas para desinfectar frutas y verduras y productos envasados. ¡Te aseguramos que si las sigues no habrá bacteria que se te resista!
Lavar y desinfectar frutas y verduras en 3 sencillos pasos
Toda precaución es poca a la hora de reducir la posibilidad de contagio ante nuevas enfermedades o situaciones de riesgo determinadas. Desinfectar frutas y verduras no solo eliminará las bacterias perjudiciales presentes en la piel de los alimentos, sino que también te permitirá eliminar restos de sustancias químicas a las que tus hortalizas y frutos hayan podido estar expuestos durante su cultivo y comercialización.
Paso 1
Antes de proceder a desinfectar frutas y verduras es fundamental tener las manos limpias. Lávalas con abundante agua y jabón, asegurándote de frotar bien todas las partes: dorsos, palmas, dedos y uñas. El lavado debe durar unos 20-30 segundos y debe ir seguido de un secado en profundidad. Además, es recomendable que el papel o toalla que uses para secarte sea de un solo uso.
Paso 2
Toma las piezas a limpiar y lávalas bajo el grifo. Para las pieles rugosas o los restos de suciedad más incrustada (como tierra en las patatas), puedes ayudarte con un cepillo o esponja. En hortalizas como la lechuga o la escarola, te aconsejamos retirar las hojas exteriores: son las que más expuestas están al contacto con agentes perjudiciales.
Paso 3
Tras la primera limpieza, es hora de desinfectar frutas y verduras en profundidad. Prepara un litro de agua en un recipiente y disuelve una cucharada de bicarbonato de sodio o ácido cítrico. Sumerge las piezas durante cinco minutos y… ¡listo! Es importante que evites los remojos solo con agua ya que, al no usar ningún producto desinfectante, la permanencia de los agentes patógenos se vería favorecida.
¡Cuidado!
Desinfectar frutas y verduras es una tarea que debes llevar a cabo antes de guardarlas o cortarlas. Si los alimentos no están limpios antes de su corte, es posible que aquellos agentes patógenos que quieres evitar pasen de la piel o corteza al interior de las hortalizas y los frutos. Recuerda: primero desinfectar, después cortar.
Lavar y desinfectar envases de alimentos
Paso 1
Nuevamente, deberás empezar por un esmerado lavado de manos. ¡No escatimes en jabón!
Paso 2
Toma un cepillo, esponja o paño de cocina con el que puedas frotar los productos a desinfectar, humedécelo y espolvorea sobre él una cucharada de bicarbonato de sodio o ácido cítrico. Después, limpia todas las caras de los productos, incidiendo especialmente en aquellos recovecos que puedan facilitar la acumulación de bacterias.
Paso 3
Para terminar, utiliza un paño limpio para secar los alimentos envasados o empaquetados antes de guardarlos con el resto de tu compra.
Poner en práctica estas rutinas de limpieza a la vuelta del supermercado te permitirá salvaguardar la seguridad alimentaria de tus compras, reduciendo así la posibilidad de entrar en contacto con agentes perjudiciales para la salud. Además, tienes que reconocerlo… ¡no pensabas que desinfectar frutas y verduras fuera tan fácil! Para estar al día de posts tan útiles como este síguenos en nuestras redes sociales. ¡Hasta la próxima publicación!